“Ellas crean” es el documental número 30 de la realizadora Lourdes de los Santos. Este mediometraje de casi 60 minutos de duración es un canto al talento femenino que, aunque anónimo o poco conocido, mueve en la isla resortes espirituales que la soportan como un referente cultural.
El documental nos muestra la obra de 9 artistas creadoras a lo largo de toda Cuba, desde el occidente hasta el oriente de la isla, en una estructura lineal sostenida, por momentos muy emotiva y siempre deslumbrante.
Con su transcurrir en pantalla es fácil percibir la cosmovisión de país que Lourdes quería mostrarnos, no solo a nivel visual con los bellísimos fotogramas que retratan lo mejor y más hermoso del paisaje de cada región; sino también sensorial y emocionalmente, porque ante cada mujer entrevistada se nos exhibe un microuniverso de elaboración artesanal o intelectual complejo, versátil, tenaz, comprometido y promisorio.
Lourdes de los Santos es graduada de Historia del Arte en la Universidad de La Habana. En 1978 entra al ICAIC como analista y asistente de producción, siendo más tarde asistente de dirección hasta llegar a ser productora de muchos documentales en 35 mm de los renombrados directores Bernabé Hernández, Oscar Valdés, Miguel Torres, Miriam Talavera, Juan Carlos Tabío, Rapi Diego, Luis Felipe Bernaza, entre muchos otros.
También fue una destacada directora de casting para algunos de los largometrajes de Manuel Octavio Gómez y de Humberto Solás, con quien hizo dos de sus más monumentales filmes: “Cecilia” y “El siglo de las luces”.
Según Lourdes, aunque le debe mucho a todos esos directores con los que trabajó, en especial a Humberto, la persona que más influencia y contribución aportó a su vida y su carrera, y sobre todo a su crecimiento profesional y humanístico, fue Alfredo Guevara, fundador y Presidente del ICAIC.
“Estar junto a él durante más de 20 años, de alguna manera u otra, muy cercana o no, en Cuba y fuera de ella, ha sido la experiencia que más ha marcado mi vida”.
ELCINEESCORTAR estuvo en el estreno de la obra en Cuba, y conversamos con su realizadora:
- Lourdes, ¿cómo surgió la idea, la inspiración para filmar tu último documental “Ellas crean”?
A lo largo de mi vida y en diversos proyectos que he desarrollado he estado conociendo muchas de las protagonistas del documental. Con el tiempo, quise mostrar una visión panorámica del país a través de ellas, porque aunque últimamente por el tema de igualdad de género se han estado haciendo muchos documentales sobre las mujeres, ninguno abordaba a las creadoras y artistas contemporáneas.
Así fue que me di a la tarea de idear el proyecto, montarlo en una escaleta de trabajo y dedicarme a indagar o consultar con diferentes personas afines al tema, entre ellas la recientemente fallecida Isabel Moya, quien tuvo palabras de elogio y de entusiasmo ante la perspectiva de un material audiovisual que abordara esta faceta femenina en la isla.
Una vez concretada la tesis, se la presenté al Ministerio de Cultura y ellos me apoyaron para realizar esta especie de difícil bojeo a la isla a través de las mujeres que crean. Finalmente, el proyecto fue asumido por el Instituto Cubano de Cine (ICAIC).
- De entre tantas mujeres creadoras tan talentosas que hay en Cuba, ¿cómo fue que definiste el casting, qué criterios tuviste para decidirte por estas peculiares protagonistas?
A muchas las escogí por lo que sé que hacen, tratando de que el espectro del talento no solo fuera peculiar, sino también abarcador. Era una deuda que yo tenía en mi obra, que siempre ha abordado temas culturales, de tener a la mujer como referente unificador, más allá de que en algunos de mis trabajos la una mujer ha sido protagonista: Alicia Alonso, Zaida del Río o Sara González.
Por ejemplo, en «Ellas crean» está Liliet Rivera, de Habana Compas Dance, porque me fascinaba la labor tan hermosa que había hecho y porque es una de las pocas mujeres cubanas que tocan los tambores batá. La orfebre Mayelin Guevara fue una recomendación que me hizo mi amiga Natalia Bolívar, quien también me hechizó no solo por su personalidad sino por las piezas tan originales que crea. A la trinitaria Yami Martínez la conocía desde hacía años por sus famosas cafeteras, pero además porque es mi amiga. Liudmila Quincoses es una mujer espirituana que me cautiva por su labor creativa a través del proyecto Escribanía Dollz, y que también conocí por un documental que le realizara el fallecido cineasta Guillermo Centeno. A Kenia Rodríguez, la editora, directora y promotora cultural de Televisión Serrana es una mujer bayamesa con quien he trabajado, adoro ese lugar del oriente de Cuba, con esa magia única que lo caracteriza, y me pareció justo reflejar a una cineasta campesina que vive y crea en la montaña. Está también Fátima Patterson, la reconocida actriz y directora de teatro santiaguera, porque hace muchos años estuve en la antigua sede de Macubá, una especie de teatro metido dentro de un solar, quedé fascinada con su trabajo y siempre quise hacerle un homenaje. En Pinar del Río conozco la obra de la trovadora Yamira Díaz, en Villa Clara la obra de Vionaica Martínez, también cultivadora de la trova tradicional cubana, y en Camagüey a Elsa Avilés, bailarina y coreógrafa del Ballet Folclórico de la ciudad, a quien conocí cuando filmé el documental del músico Adalberto Álvarez, porque ella es quien sale en el concierto masivo que dio en la plaza de la ciudad bailando como Oshún.
- Háblame del rodaje
El rodaje del documental se hizo prácticamente de un solo golpe por toda Cuba: entre preparación y filmación estuvimos mes y medio. El plan de producción creo que lo hizo de una manera muy sabia Magaly González, y eso nos permitió celeridad y eficiencia.
- ¿Cuál fue el equipo técnico?
Mi equipo fue bien pequeño, mínimo, que fue la clave para que nos pudiéramos mover tan rápido por toda la isla.
Ya te hablé de Magaly como productora, pero también estuvieron Yamil Santana como director de fotografía y cámara, Alain Finalé como segunda cámara, Ricardo (Tato) Pérez como sonidista y mezclador de la banda sonora, Pedro Suárez como editor, José Miguel Quevedo como corrector de color y luces y Ángel Molina como productor asistente. El guión es de mi autoría.
- Háblame de la etapa de postproducción
La postproducción tomó mucho más tiempo que el rodaje, porque Pedro Suárez, el editor, tenía que simultanear su trabajo en este documental con otros dos proyectos de largometraje que estaba terminando para su exhibición en el Festival de Cine de La Habana: “Sergio & Serguei” de Ernesto Daranas y “Por quién lloran mis amigas” de Magda González Grau.
Una vez terminado el corte final, comenzó la etapa de etalonaje o corrección de color y luces, así como la creación y mezcla del sonido.
- La música de tu documental es original de Lucía Huergo, esa gran amiga que falleció prematuramente. ¿Por qué la escogiste?
Porque, sin lugar a dudas, ella hubiera sido la décima creadora a entrevistar en mi documental. Ya que no podía tenerla físicamente, al menos está en él a través de su música. Se lo agradezco mucho a su compañera de toda la vida y su gran amor Niurka Pérez.
Te puedo afirmar que el documental, íntegramente, es un merecido tributo a Lucía Huergo. También es un canto a Cuba a través de la mujer creadora.
- Después de su estreno oficial, que ha sido simultáneo en la sede de la Cinemateca de Cuba y en la Televisión Cubana, ¿cuál es el camino que piensas recorrerá y qué expectativas tienes?
No sé qué caminos recorrerá, en cuáles Festivales o Muestras será exhibido, pero sí tengo muchas expectativas, porque me encantaría que la labor de estas maravillosas creadoras cubanas no tan publicitadas por la gran prensa o los grandes circuitos del arte fuera conocida y también reconocida.
- De la Lourdes que comenzó a mediados de los 90 a la realizadora ya experimentada que eres, ¿cómo te ves ahora?
Mis inicios fueron contigo como codirectora. Después fuiste guionista y editor de muchos de mis proyectos, eso no lo voy a olvidar nunca.
El primer documental para mí significo una hazaña, un logro consumado que culminaba una etapa larga de aprendizaje en la industria de cine. Yo venía de trabajar toda la vida en 35 mm, que requiere una parafernalia gigantesca y temeraria, adorable y mágica también, y entraba en el mundo novedoso del video y lo digital, cuya técnica y terminología me resultaban desconocidas.
Tímidamente me enfrenté a ese universo, y ahora te puedo decir que me siento cómoda. La actual tecnología conque contamos ha permitido lograr este proyecto de la manera que se hizo; pensar en hacerlo hace unos 30 o 40 años en celuloide hubiera sido imposible en las condiciones actuales.
Director, editor y guionista cubano ganador en 2017 de un Emmy Award de la National Academy of Television Arts and Sciences (NATAS) en Estados Unidos, de la que ha recibido 5 nominaciones anteriores.
También ganador en la categoría Video del Gerald Loeb Award 2017, el galardón más alto y prestigioso en Estados Unidos al periodismo financiero y de negocios, ganador del Premio Coral Especial del Jurado en el Festival Internacional de Cine de La Habana de 1997 por su largometraje documental “El cine y la vida”, así como otros reconocimientos internacionales. Algunos de los filmes que ha editado han sido nominados a los Premios Goya en España, así como a los Premios Platino del Cine Ibeoramericano.
Actualmente reside en Miami y trabaja como editor para NBC Universal Hispanic Group.